~ liñe ~ dibujo espacial
| Raumzeichnung | spatial drawing |
Ortsspezifische Installation im Kunstraum »la_minima« – espacio ambiguo, Valencia
Ausstellung: 3. – 12. März 2022
Die Künstlerin Cordula Hesselbarth hat für den Kunstraum »la_minima« in Valencia eine ortsspezifische Rauminstallation entwickelt. Das Werk ~ Liñe ~ löst die Linien von der Fläche des Bildträgers und erweitert die Zeichnung in den dreidimensionalen Raum.
~ liñe ~
dibujo espacial – Raumzeichnung
Die Künstlerin zeichnet gewissermassen schwerelose Linien aus Fäden in den Galerieraum. Die schwebenden Linien verschmelzen mit gezeichneten Stift- und Tusche-Linien auf transparenten Tüchern. In der Bewegung um das Werk erschliesst sich den Betrachter*innen das Volumen und die Plastizität der Zeichnung.
Über die dreidimensionale Raumzeichnung legt sich eine Projektion aus bewegten abstrakten Linienformationen, die den intimen Prozess des Zeichnens offenlegen: Linien entstehen, lösen sich auf; zarte, energische, zögerliche, kräftige Linien, die sich schlängeln, mäandern, kritzeln, stricheln; sie bilden Spiralen, Knoten, Netze. Die vierte, zeitliche Dimension interagiert mit der dreidimensionalen, materiellen Raumzeichnung.
Im Hintergrund der Galerie werden die Lichtlinien aufgefangen von der Aussenmauer der Basílica del Sagrado Corazón de Jesús aus dem 17. Jahrhundert. An der Mauer darf aus Gründen des Denkmalschutzes nichts angebracht oder verändert werden, so zeichnen sich die bewegten Lichtlinien flüchtig und ephemer auf das schöne alte Mauerwerk, ohne es zu berühren.
Die Installation transformiert diesen besonderen Ort. Mit dem Werk versucht Cordula Hesselbarth auch das Genre der klassischen Zeichnung zu erweitern, die Linie aus Fläche und Format des Mediums Papier herauszulösen und den herkömmlichen Begriff von Zeichnung zu hinterfragen. Die Künstlerin überschreitet mit ihren Experimenten die Grenze des Papierbogens oder Tafelbildes in Richtung von Skulptur, Raum und Bewegung.
La artista Cordula Hesselbarth ha desarrollado una instalación site-specific para el espacio de »la_minima« en Valencia. La instalación »Liñe« libera a la línea del soporte de la superficie de papel y proyecta el dibujo en el espacio tridimensional. De alguna manera, la artista dibuja con líneas de hilo flotando libremente en el espacio. Estas líneas se combinan con otras dibujadas con lápiz o tinta sobre telas transparentes colgadas del techo. A través del recorrido alrededor de la obra se le revela al espectador/a el volumen y la plasticidad del dibujo. Y sobre este dibujo espacial en tres dimensiones se proyecta y superpone una proyección de formaciones lineares abstractas, que ponen de manifiesto el proceso íntimo del dibujar: líneas que aparecen y desaparecen. Líneas suaves, enérgicas, vacilantes, fuertes, que reptan en meandros, garrapateando, rayando. Líneas formando espirales, nudos, redes. Así, la cuarta dimensión (temporal) interactúa con la tridimensionalidad concreta del dibujo espacial.
El fondo de la antigua pared de la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús del siglo XVII captura también este dibujo espacial. Por tratarse de un muro con protección patrimonial, no se lo debe tocar ni puede ser modificado, por lo tanto la líneas de luz luminosas, se dibujan de manera sutil y efímera sobre el preciado muro.
La instalación parece transformar así este lugar extraordinario. Con su obra Cordula Hesselbarth intenta además ampliar el concepto clásico del dibujo, liberando a la línea de la bidimensionalidad del plano y cuestionando así el concepto tradicional del dibujo artístico. La artista trasciende con su propuesta la frontera que separa la expresión bidimensional de la tridimensionalidad que propone la expresión escultórica, y la dimensión temporal a partir del movimiento.
Fotos: © Hermann Dornhege
~ liñe ~
Osvaldo Puente
… Es kommt darauf an, zu wissen, wo wir den Ausgangspunkt setzen, auf die Verankerung in der Zeit. Ausgehend von diesem Zeitpunkt kann eine Linie durchaus eine Grenze sein (die äusserste Trennlinie zwischen zwei Welten). Sie kann auch ein Pfad sein (die Aufzeichnung einer Spur, die auf einer Oberfläche beim Gehen hinterlassen wird). In jedem dieser beiden Fälle nehmen wir die Überreste dessen wahr, was bereits geschehen ist, eine Wahrnehmung von etwas Früherem, die die Vergangenheit hervorruft und in ihr verankert ist. Eine unwiderstehliche Aufforderung, Kategorien zu formulieren, ein Appell zu benennen, zu etikettieren.
Aber wenn wir in den gegenwärtigen Moment schlüpfen, wenn wir versuchen, die Wahrnehmung dazu zu bringen, Vorurteile aufzugeben, um sich dem vagen Werden hinzugeben, dann ist die Linie eine unvorhersehbare, unerwartete Reise. Die Linie wird zu einem Leitfaden, der uns dazu führt, Formen zu entdecken, die im Augenblick ihrer Entstehung auftreten. Die Linie nimmt Raum ein und beansprucht Zeit als unverzichtbare Dimensionen, um zu existieren. Sie zeichnet sich selbst in einer Folge von Momenten, sie spielt und mäandert in unerwarteten Brüchen, Umwegen, Entdeckungen.
In diesen Momenten ergibt sich die Wahrnehmung dem, was ist, dem, was passiert, und verlässt die Krücken des Gewesenen.
Die präsentierte Arbeit der Künstlerin Cordula Hesselbarth ermöglicht uns diese Erfahrung. Ihr wacher Blick ist offen für die Gewissheit, dass Zeichnen ein kontinuierlicher Akt und nicht nur eine Spur oder ein Ergebnis ist. Wir betrachten nicht länger Linien aus der Vergangenheit, die definieren oder umschreiben. Dies sind Linien, die genau im Moment des Seins wahrgenommen werden. Eine Reise zu den Sinnen. Eine Gelegenheit, auch nur für wenige Augenblicke zu versuchen, die Vergangenheit zu verlassen und so dem konzeptuellen Verstand eine notwendige Pause zu gönnen. Es geht nicht darum, Wissen zu vermehren, es geht darum, hier Weisheit zu erfahren.
Osvaldo Puente. Valencia Marzo 2022
~ liñe ~
Osvaldo Puente
Todo es cuestión de saber dónde estamos fijando el punto de inicio, el momento de anclaje en el tiempo.
A partir de ese momento una línea puede bien ser un borde (la frontera última que separa dos mundos). Puede ser trazo (el registro de una huella dejada sobre una superficie en el andar). En cualquiera de estos dos casos percibimos los restos de lo que ya ha ocurrido, una percepción pretérita que evoca y se ancla en un pasado. Una invitación irresistible para la formulación de categorías, una apelación al nombre, a la etiqueta.
Pero cuando nos deslizamos al momento presente, cuando intentamos que la percepción abandone preconceptos y se entregue al fluctuante devenir, entonces la línea es un viaje imprevisible, inesperado. La línea deviene guía, nos va llevando a descubrir formas que ocurren en el mismo momento de su gestación. La línea toma el espacio y reclama el tiempo como dimensión indispensable para ser. Se dibuja a sí misma en una consecución de instantes, juega y serpentea en inesperados quiebres, desvíos, hallazgos.
Es en esos momentos en los que la percepción se rinde a lo que es, a lo que está siendo y deja las muletas de lo que ha sido.
La obra que nos presenta la artista Cordula Hesselbarth, su ojo alerta, abierto ya a la certeza de que el dibujo es un acto infinito y no solamente una huella o resultado, nos regala esa experiencia. Ya no son líneas del pasado que definen o circunscriben. Se trata de líneas percibidas en el preciso instante de estar siendo. Un viaje a los sentidos. Una oportunidad para intentar, aunque sea por unos instantes, abandonar pasados y dejar así que la mente conceptual se tome una necesaria pausa. No se trata de aumentar conocimientos, se trata aquí de experimentar sabiduría.
Osvaldo Puente. Valencia Marzo 2022
© 2022 Cordula Hesselbarth